Entrevista con ‘El Plaga’ : Mexico asegura que está en prisión, pero él asegura que está libre
El Plaga habla por primera vez sobre la nueva generación de sicarios y revela detalles de la pelea interna del Cartel de Sinaloa
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Nota - Esta Historia due originalmente publicada en www.crashoutmedia.com y parcialmente reproduced aquí por LUIS en su capacidad de co-autor. Para leer el artículo completo haz click en el link de arriba.
Luego de un tiroteo en la ciudad fronteriza de Mexicali -colindante con Calexico, California- la policía detuvo al jefe de sicarios conocido como “El Plaga”. Ahora, según las autoridades, está encerrado en una prisión federal. Sin embargo, el hombre con el que hablo por videollamada afirma ser El Plaga y dice estar libre y operando.
“A mi me dejaron salir,” me dice mientras conduce una camioneta. La llamada sucede de noche, cerca de las 21 horas. “Aquí sigo, donde mismo, haciendo lo mismo”.
Es delgado y muy joven, sólo tiene 24 años, pero tras su apariencia juvenil se esconde un narco curtido que lleva ya una década en una facción del cártel de Sinaloa. ‘El Plaga’ es considerado una figura de alto rango en una célula criminal que controla un tramo de la frontera con Estados Unidos. Obtuvo su apodo, dice, porque "no deja a nadie vivo, como una plaga".
El hombre de la videollamada se parece a una foto de ‘El Plaga’ que apareció tras su detención en el estado de Baja California en 2022. Me muestra una identificación con Cristian Alexis Mendoza Guillén, uno de los nombres con los que fue identificado por la policía. Y conoce detalles complejos del cártel.
Sin embargo, en la guerra del narco, es difícil saber a quién o qué creer, así que creo pertinente advertir sobre ello y profundizar en los enredados detalles del caso a continuación. Plaga (o el hombre que dice ser él) se puso en contacto conmigo después de que publicara una entrevista con otro narco, Dámaso López Serrano, "El Mini Lic," que se hizo viral. El Plaga trabaja para un traficante conocido como El Ruso, al que se refiere como ‘Jefe R’. Al igual que Dámaso, El Ruso y Plaga están en una sangrienta guerra contra Los Chapitos, la facción del cártel liderada por los hijos de El Chapo. La última lucha ha dejado un reguero de cadáveres en Baja California, Sonora y Sinaloa.
Para hacerlo aún más surrealista, ‘El Plaga’ tiene una supuesta cuenta de Instagram con más de 60.000 seguidores, en la que publica fotos de armas, relojes caros, coches deportivos y grupos musicales. Tiene varios corridos sobre él. Y hace poco publicó un vídeo de un mono que sus sicarios utilizan como mascota (más abajo da detalles al respecto). No se esfuerza precisamente por ocultarse.
El testimonio de Plaga es condenatorio para las fuerzas de seguridad mexicanas y su capacidad para contener a presos peligrosos. También ofrece una visión única de lo que impulsa las luchas internas en el cártel de Sinaloa, causantes de una ola de derramamiento de sangre en el noroeste de México. Y ofrece detalles pintorescos sobre la cultura de la nueva generación de narcos, desde sus perfiles en las redes sociales hasta sus vínculos con el negocio de la música, pasando por sus mascotas exóticas.
Sin embargo, el caso es explosivo y confuso. Y necesito desenredar esos detalles antes de que podamos entrar en el jugoso relato de su vida en el cártel.
Plaga fue detenido en noviembre de 2022 en Mexicali. Según me cuenta, salía de un bar después de una noche de fiesta con su compadre, "El Benny", en un auto que llevaba un montón de armas cuando llegó la policía estatal. Plaga paró el coche para intentar evitar un incidente. Pero su compañero Benny (que según la policía estaba drogado con cocaína y fentanilo) sacó un rifle y empezó a disparar. “Yo salí corriendo cuando vi que El Benny cayó muerto”, cuenta Plaga.
Plaga fue incapaz de llegar a un acuerdo con este grupo concreto de policías estatales, que acababan de ser tiroteados. “Esos no se alinean, no jalan con uno, trabajan nomás para ellos mismos y son bien duros”, afirma. Le dieron una severa golpiza y le hicieron una foto de ficha policial cuando aún estaba ensangrentado.
Se informó ampliamente de la detención, ya que los "Rusos" están detrás de mucha violencia. En un principio, ‘El Plaga’ iba a ser acusado en Baja California de intento de asesinato por los disparos de Benny a los policías, pero los fiscales estatales dijeron más tarde que sólo tenía cargos federales contra él.
Luego, casi un año después, este octubre, la revista Zeta publicó que ‘El Plaga’ no se había presentado a una audiencia judicial y se le reportó como “no localizado”. Esto provocó una respuesta de la nueva fiscal de Baja California, María Elena Andrade Ramírez, quien dijo que ‘El Plaga’ había sido transferido a custodia federal.
“Fue trasladado a un penal federal de máxima seguridad”, dijo a un grupo de reporteros. “Fue debidamente convalidado por los jueces este traslado ... Se entrego debidamente, tenemos la evidencia correspondiente, al Cefereso numero 13 de Oaxaca”.
La llamé para saber si ‘El Plaga’ seguía detenido. “Tengo entendido que ese sujeto fue trasladado en efecto a un Cefereso y que continúa en ese lugar”, dijo.
Aun así, introduje su nombre en el Sistema Nacional de Consulta de Detenidos y sólo aparecía una fecha de detención sin indicación de su ubicación. Envié un correo al Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, pero no me contestaron.
También podría haber confusión sobre quién está o estaba realmente detenido. Plaga fue identificado con varios nombres, entre ellos también Eduardo René Robles López. Y algunas de las fotos de él parecen incluso que podrían ser personas diferentes.
En la videollamada, ‘El Plaga’ asegura que su jefe El Ruso logró su liberación después de sólo tres días, pero no entra en detalles exactos. “El Jefe R negoció con ellos que me dejaran salir y me quitaron todos los cargos, ahorita no tengo ningún cargo ni nada en el estado”, dice, con un dejo de orgullo. (Plaga podría referirse a que le retiraron los cargos estatales y aún podría haber cargos federales contra él).
La enmarañada red pone de manifiesto el opaco y disfuncional sistema de justicia mexicano. Pero el hecho de que un delincuente peligroso esté en la calle no sorprendería a nadie en México. Las fugas de prisión son frecuentes, desde el sonado túnel de El Chapo hasta fugas masivas como la de decenas de pandilleros en Ciudad Juárez en enero. Los pandilleros también pueden salir por decisiones dudosas de los jueces, como cuando el narcotraficante Rafael Caro Quintero fue liberado en 2013 para ira de la DEA.
Incluso se ha descubierto que los presos entran y salen de las cárceles. En 2010 estalló un escándalo cuando se descubrió que reclusos de Durango salían, perpetraban masacres en el vecino estado de Coahuila y luego regresaban a dormir a sus celdas. Incluso utilizaron las armas de los guardias para cometer los asesinatos.
Narco Gen Z: Instagram, Cumbia-Rap y monos mascota
‘El Plaga’ nació en Sinaloa, la cuna del narcotráfico mexicano, donde se unió a las filas del crimen organizado con sólo 13 años, según me cuenta. El reclutamiento de narcos a esta temprana edad se ha convertido en algo dolorosamente habitual. En Tamaulipas, un sicario de 13 años conocido como Juanito Pistolas fue celebrado con canciones, pero finalmente los soldados le volaron la cabeza cuando acababa de cumplir 17 años.
Plaga se sintió atraído por la vida criminal, dice, por las baladas sobre drogas de un grupo de asesinos del cártel de Sinaloa conocidos como los Ántrax. Como él, utilizan una metáfora de un virus letal; mientras que los críticos llaman a los cárteles un cáncer, ellos mismos también utilizan la comparación.
“Yo entré por los corridos que le hacían a Los Ántrax”, ”, dice Plaga. "Yo quería ser Ántrax”.
Muchos de estos pistoleros adolescentes son tratados como carne de cañón y tienen vidas sangrientas y cortas. ‘El Plaga’, sin embargo, sobrevivió y fue reclutado por un operador clave del Ismael “El Mayo” Zambada, en el estado de Baja California. “Ahí ellos me dieron trabajo. Primero en Tijuana y Tecate y después en Rosarito y Ensenada,”, cuenta.
Ascendió en el cártel hasta convertirse en jefe de sicarios a los 20 años, trabajando para El Ruso -según los informes, su verdadero nombre es Jesús Alejandro Sánchez Félix.
Plaga representa a una nueva generación de matones de los cárteles, que el alcanzó la mayoría de edad en 2017, cuando la guerra contra el narcotráfico iniciada por Felipe Calderón llevaba ya una década. Creció en medio de las redes sociales, las drogas sintéticas y una guerra del narco que parece que nunca se detendrá.
Muchas de las cuentas de redes sociales que han aparecido con nombres de narcos en activo son obviamente falsas. Pero hay otras que parecen auténticas, con decenas de miles de seguidores o más, incluida la de ‘El Plaga’. Aunque por lo general evitan mostrar los rostros de los narcos (aunque algunos si lo hacen), muestran armas, animales exóticos, relojes caros, drogas y los cuerpos escasamente vestidos de sus novias. Utilizan la plataforma para mofarse de sus rivales.
‘El Plaga’ cuenta que tras una prolongada batalla en Sinaloa entre los Rusos y los Chapitos en 2020, los Rusos finalmente tuvieron que retirarse a Baja California. “El Nini [jefe de seguridad de los Chapitos] me escribió por Instagram después de eso burlándose de que nos ganaron,” dice ‘El Plaga’.
Le pregunto por qué jodidos los narcos publican en las redes sociales cuando se les busca. Responde que no muestra delitos reales, como tiroteos y decapitaciones, sino sólo sus “lujitos”. Para los mafiosos, las redes sociales les dan la oportunidad de presumir de su riqueza y crear una base de seguidores; a su vez, animan a los jóvenes a su estilo de vida.
La nueva generación de narcos también es cercana a una nueva generación de músicos. Peso Pluma, que se ha convertido en uno de los artistas mexicanos de más éxito de todos los tiempos con el estilo de “corrido tumbado”, tiene supuestamente canciones sobre los operativos de los Chapitos. Plaga, por su parte, tiene varios corridos sobre él, incluido uno de la banda Revolver Cannabis que tiene casi dos millones de visitas en YouTube. Como dice la canción: “Traigo veneno, traigo plomo, traigo balas. Soy muy tóxico si me agarran de malas.”
También hay una canción reciente en el nuevo estilo de “cumbia-rap”, llamada El Plaga, del artista David Villavicencio. “Traigo los aparatos, tengo buena puntería, sea de noche o sea de día, me la pela pa’ pelear”, suena la canción.
‘El Plaga’ me describe cómo las canciones son en su mayoría encargos de los narcos de los que hablan, y los mafiosos tienen que aprobar las letras antes de que se publiquen. De nuevo, esto da a los cárteles una gran influencia en la cultura.
Aunque a los narcos les gustan los animales exóticos desde hace mucho tiempo, a la nueva generación le gusta presumir de ellos en las redes sociales. En octubre, soldados mexicanos asaltaron un rancho y se incautaron de dos tigres de bengala de El Nini. Y lo que es aún más extraño, las fuerzas de seguridad mexicanas se enzarzaron el año pasado en una batalla en el Estado de México en la que mataron a tiros a un mono araña. El simio iba ataviado con un chaleco antibalas y camuflaje como los sicarios con los que iba, e incluso se le dedicó un corrido.
En octubre, el equipo de ‘El Plaga’ se hizo con su propio mono y publicó un vídeo en las redes sociales con un rifle caro. Le pregunto de dónde sacó el chango. “Este mono me lo regaló mi compadre”, me dice Plaga. “No era mío, pero son de los lujitos que uno se puede dar.”
Rusos contra La Chapiza
‘El Plaga’ me ofrece el primer relato público de las nuevas luchas internas del Cártel de Sinaloa que han provocado el derramamiento de sangre en el noroeste de México.
Nota - Esta Historia due originalmente publicada en www.crashoutmedia.com y parcialmente reproduced aquí por LUIS en su capacidad de co-autor. Para leer el artículo completo haz click en el link de arriba.